Montevideo, 11 de julio de 2022

Hemos seguido con preocupación el fallo de la justicia en manos del juez Alejandro Recarey quien dictaminó la “suspensión inmediata” de la vacunación contra el coronavirus a niños menores de 13 años en nuestro país.

Nuestra Asociación Civil 20 de Setiembre adhiere a una concepción racional y laica. Por lo tanto se posiciona contra todo dogma, creencias oscurantistas o teorías conspiratorias que atenten contra la libertad de las personas. Y en este sentido – sin abandonar el espíritu crítico – hace confianza a la academia científica nacional y extranjera y a los expertos y expertas en la materia, que han realizado las pruebas necesarias garantizando que se están distribuyendo productos de calidad, que en las condiciones de urgencia por la pandemia, han logrado salvar muchas vidas.

Todas las vacunas que se han estado suministrando a la población fueron aprobadas por los expertos de la Organización Mundial de la Salud, los más reconocidos comités de expertos internacionales, y nuestros propios expertos de la Academia Nacional de Ciencias del Uruguay, el Grupo Asesor Científico Honorario (GACH) y la Comisión Nacional Asesora de Vacunas, los mejores expertos en la materia del Ministerio de Salud Pública. Esto ha dado tranquilidad a la población y se han logrado una vacunación totalmente exitosa, al tiempo de cuidar la libertad personal, en la medida que en ningún momento la vacunación fue obligatoria. Esto ha colocado a nuestro país entre los mejores índices a nivel internacional de preservación frente al coronavirus.

Por este motivo no podemos evitar conmovernos ante esta situación, ya que el acto de suspender la vacunación a esta franja etaria o cualquier otra de la población conspira contra el bienestar humano y el derecho a la salud. E incluso atenta contra la libertad de las personas de desear vacunarse si así lo estiman pertinente para el cuidado de sus vidas.

Preocupa a nuestra asociación igualmente los posibles sesgos que atenten contra la imparcialidad de las decisiones judiciales, las cuales deben adecuarse al derecho y a las evidencias y pruebas objetivas; las cuales en este caso, con el concurso de la academia científica nacional e internacional han sido más que evidentes a favor de las bondades de la vacunación.

La decisión judicial, de acuerdo a nuestro sistema democrático republicano de división de poderes, debe acatarse. Sin embargo nuestro sistema de libertades nos permite poder emitir nuestra opinión crítica: para nosotros esta decisión judicial es científicamente equivocada, epidemiológicamente riesgosa, y socialmente irresponsable.

Esperemos que la sensatez haga dar marcha atrás con este empuje oscurantista, y no haya sido más que un intento de algunos de conseguir sus 15 minutos de fama; aunque para ello haya que poner en riesgo al conjunto de la población.

Finalmente, nuestro anhelo es que podamos recuperarnos de esta epidemia, salvando la mayor cantidad de vidas y de recursos, y podamos volver a la vida lo más normal posible desde todas las dimensiones humanas afectadas.

Asoc. Civil 20 de Setiembre
Montevideo – Uruguay